Día Tercero / Third day run /19th

Llegamos al tercer día con los carteles puestos y el subsiguiente efecto llamada. Caminaba desde la recepción hacia las habitaciones tranquilamente cuando al abrir la puerta quedé estupefacto al ver una mujer sentada en el banco mirándome: un susto de infarto. (¿por dónde había entrado?)
Le saludé y noté que hablaba alguna lengua europea. Se presentó como alemana peregrina y entonces le mostré las dependencias. Ya teníamos la primera peregrina de nuestra breve historia: Antie Fleischhemer. Poco después fueron llegando más peregrinos en bici, algunos hicieron una tímida inspección marcharon a dar una vuelta y luego regresaron de nuevo para alojarse. Uno de ellos, que nos sorprendió gratamente fue un belga que viajaba en un TRICICLO. Tenía una discapacidad motriz en manos y piernas y posiblemente descubrió que nuestro albergue dispone de la estructura ideal para gente con discapacidades motrices. Ello le convenció. Bernard Thiky: 1750 km en triciclo desde Bélgica. Y no terminaron las sorpresas. También apareció durante la mañana nuestra segunda pe

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