lunes, julio 31, 2006

Primera semana de vida / First week on duty

Después de una noche un tanto disoluta (eufemismo al uso para no entrar en detalles) amanecimos dispuestos a recibir nuevos peregrinos y despedir como se merecen a la mayoría de los del día anterior. Digo la mayoría porque empezamos a tener casos de reincidentes de más de dos días. Y ahora es el momento de comentarlo. Bien, vamos a jugar AL JUEGO DE LA OCA TEMPLARIA.
Es muy normal que alguien permanezca más de un día en un albergue pero tres o cuatro ya es cuestión de necesidad o tolerancia del hospitalero. Este no es un lugar de vacaciones. El hecho de dar cuartelillo a algunas personas no pasaba de ser mera anécdota. Pero la cosa cambia cuando se producen PERMANENCIAS O REINCIDENCIAS anormales. Me explico. Cuando escribo estas líneas es día 31 de Julio. Ayer mismo se produjo el SEXTO CASO EN OCE DÍAS de peregrinos RETORNADOS A ESTE PUNTO DEL CAMINO y/o ATASCADOS por causas que no debo especificar. Confieso que desconocía esta especie de "juego de rol" "Juego de la oca templario" o como se quiera llamar. Empezaré a estudiarlo pues al menos dos personas me lo comentaron. La primera persona me lo comentó justo en el momento de inaugurar el albergue. Se llama Albino González, un esotérico conocedor del arte y la iconografía antigua. Me sugirió que diseñase elementos templarios del Juego de la Oca en la fachada. -¿Qué es eso? --le pregunté. Y me dijo en breve que se trataba de un misterioso juego de rol en el que las personas recorrían lugares y sufrían diversos avatares propios de cada ciudad-casilla. Otra visitante, Carmen, una ilustrada profesora me lo refirió igualmente sin que yo se lo hubiera pedido. La misma explicación. Curiosamente ella sufrió otro "retorno" (no sabemos si forzado, forzoso, deseado o no). Así podría nombrar varios casos (seis para ser exactos) dos de ellos ¡¡¡desde Astorga!!!. Tiene gracia ¿verdad?
Bien, un domingo tranquilo en el que almorzamos con nuestro visitante-remanente el alemán Frank y contamos con la presencia de la hermosa Ángela, como alberguera brasileira.
Celebramos, además, la primera gran cena INTERNACIONAL en el albergue. Una bonita reunión de gente de todo el mundo en la que compartimos cosas que todos trajimos. Mención especial de Jordi que se ofreció generosamente a dar una breve sesión de "acupuntura" caliente a algunos albergados. Un día para recordar.